Una vez metidos en contexto, os presento la casa, el hogar durante muchos años de una familia de nueve miembros, mis dos abuelos y sus siete hijos.
Se encuentra entre dos de los hitos del pueblo, las vías del tren y el río. Ante su ubicación frente a las vías del tren, nadie permanece indiferente cuando pasa, ya que la vibración que genera se deja sentir por todas partes.
En el final de la calle donde se sitúa hay una cuesta, desde la que se llega al terreno que también comunica con la parte posterior. Cuenta con esta forma triangular dibujada por el cauce del río, que pasa a unos metros de esta parte trasera.
La empresa de explotación minera encargó construir estas viviendas básicas para sus trabajadores y familias, entre ellas la mía.
Fue construida en 1914, su estructura está basada en grandes muros de piedra de 60 centímetros que actúan como muros de carga. Los forjados son a base de traviesas de madera sobre las que descansa la tarima y la cubierta esta formada por cerchas de madera terminada en teja cerámica.
Estructuralmente la construcción funciona como una gran casa de dos plantas y una tercera en forma de buhardilla en la parte central. Esta construcción se dividió en tres, cada una para una familia de trabajadores, de la cual mi familia habitaba la parte central.
En efecto, muy poco espacio para vivir nueve personas, teniendo en cuenta además que la parte abuhardillada no nos correspondía a pesar de vivir debajo.
En total la vivienda tiene una superficie útil de 75,6 m² distribuida en cuatro dormitorios y un baño.
Su distribución es bastante básica, comenzando con un largo portal de acceso, cuyo único fin es el de proteger del frío al resto de la casa cuando la puerta se abre. Una vez traspasado, se llega al corazón de la casa, la cocina. El lugar más importante de la casa y el espacio más vivido. Su cocina de carbón es lo que proporcionaba calor al resto de las estancias, es decir, cuanto más lejos estuvieras de ella más sentías el frío. La ventana de la cocina contaba además con una doble función, la de iluminar y la social. Por ella puedes ver como llegan los trenes al pueblo sin ser visto, por la diferencia de altura con las vías.
La siguiente estancia es el salón- comedor, pequeño en comparación con la cocina y también con "ventana social".
En la parte posterior de la cocina, se encuentra la escalera de acceso a la primera planta, cuyo espacio inferior se aprovechó como despensa, así como un dormitorio. Estas dos estancias cuentan con ventas al terreno posterior de la casa.
Planta baja Planta primera
La primera planta cuenta con el elemento más característico, incómodo y frío de la casa: el baño. Ocupa el lugar de un balcón, ya que se hizo posteriormente a la construcción de la casa. Sus dimensiones son de 3 x 1,2 metros, minúsculo.
El resto de esta planta cuenta con tres dormitorios, uno de los cuales era el "privilegiado" y es el que tenía debajo la cocina, ya que el calor de la misma subía por la pared como si de un radiador se tratase.
La casa lleva muchos años ya deshabitada, aunque sigue presente en todos nosotros, esperando tal vez a una segunda vida, al igual que el pueblo. Es por esto que el estado actual de la misma es nefasto, de hecho pienso que su tejado puede que no resista más otro invierno con nieve.
Aquí dejo el reportaje fotográfico que hicieron mis familiares al día siguiente de enterarse de este trabajo. Gracias por ello.
